Primera novela de esta conocida periodista y a la que, en mi opinión, le sobran la mitad de las páginas escritas. Una novelita corta, romántica al estilo de los años 40, basada en la relación real y muy escandalosa para la época, entre la marquesa de Llanzol y Serrano Suñer, habría sido más que suficiente.
Esta es la única línea argumental que he encontrado atractiva para el lector. El resto de las páginas dedicadas a la relación política entre Franco, Serrano Suñer, los alemanes, americanos , ingleses y demás son mortalmente aburridas.